En el Turín de los años setenta, Dora, una niña sensible y curiosa, vive en una casa que se transforma tras un duelo familiar: el bullicio cotidiano da paso a un silencio extraño y perturbador. En medio de ese silencio, Dora comienza a oír susurros inquietantes y sonidos que nadie más percibe.

Buscando un refugio, Dora encuentra una biblioteca local, un espacio de quietud y descubrimiento. Allí conoce al abogado Ferro, un lector empedernido con un oído excepcional, quien le abrirá las puertas al mundo de los libros y la ayudará a interpretar los susurros que la rodean.

Con una narrativa delicada y sutil toque de realismo mágico, esta novela celebra el poder de la literatura, la importancia del silencio y la escucha, y la capacidad de los libros para guiarnos en los momentos más oscuros.