Este libro recoge veintitrés cartas que la artista colombiana Emma Reyes escribió a su amigo Germán Arciniegas a lo largo de varias décadas. En ellas narra sus recuerdos más tempranos: hija ilegítima nacida en Bogotá, en 1919, vivió unos años en compañía de su hermana mayor y la supuesta madre de ambas en varias ciudades y pueblos; al final, las niñas fueron abandonadas y entregadas a un convento de monjas donde permanecieron gran parte de su niñez. Este testimonio describe la Colombia discriminatoria, clasista y racista de los años treinta. A través de los ojos de la pequeña Emma, el lector se enfrenta a una sociedad hipócrita, que prefiere maltratar un niño que evidenciar...
Este libro recoge veintitrés cartas que la artista colombiana Emma Reyes escribió a su amigo Germán Arciniegas a lo largo de varias décadas. En ellas narra sus recuerdos más tempranos: hija ilegítima nacida en Bogotá, en 1919, vivió unos años en compañía de su hermana mayor y la supuesta madre de ambas en varias ciudades y pueblos; al final, las niñas fueron abandonadas y entregadas a un convento de monjas donde permanecieron gran parte de su niñez. Este testimonio describe la Colombia discriminatoria, clasista y racista de los años treinta. A través de los ojos de la pequeña Emma, el lector se enfrenta a una sociedad hipócrita, que prefiere maltratar un niño que evidenciar sus flaquezas, así como al oscuro mundo de las comunidades religiosas, contaminando de discriminación social, machismo y crueldad, plagado de supersticiones y prejuicios.